Tras casi dos meses con toda la actividad no indispesable paralizada el 11 de mayo ciertos sectores han vuelto a activarse. Los rodajes y grabaciones vuelven a la actividad.

Lógicamente debemos entender que esta "vuelta a la normalidad" se debe realizar guardando las más estrictas medidas recomendadas por las autoridades sanitarias.

Aprovechando esta "nueva normalidad" desde la Administración se quiere empujar el sector favoreciendo los rodajes y grabaciones en nuestro país por lo que se han aumentado los incentivos fiscales.

España es un país ideal para los rodajes por varios aspectos entre los que podemos destacar su amplia variedad de entornos: playa, ciudad, campo, montaña, entorno rural, etc. Además ofrece muchas horas de luz lo cual favorece el aprovechamiento de las jornadas. Por otra parte, al ser un país con mucha historia dispone de entornos con una gran carga histórica además de diferentes estilos.

Es cierto que estas medidas solamente van a servir cuando las fronteras se abran definitivamente ya que de momento esto no es viable hasta que la situación no se normalice completamente.

De un 20 por ciento de deducciones fiscales se puede pasar a un 30 por ciento para el primer millón de euros y el 25 por ciento para el resto del gasto en España. Estas inversiones pueden ser en producciones españolas de largometrajes y cortometrajes cinematográficos, series de ficción, documentales o de animación.